Entrevistamos a Jordi Pereira, vencedor por segundo año consecutivo de la categoría SOLO en la Powerade Non Stop Barcelona-San Sebastián:
“Me he pasado un año recordando lo que hice y ahora que
repetí victoria con menos tiempo, pensé… Jordi, lo que pensabas que había sido
imposible, lo has vuelto a hacer”
La logística no era fácil, Jordi tomaba la salida de la
Powerade Non Stop Barcelona San Sebastián como ganador de la 1ª edición de la
prueba. Además, le había prometido a su hija Núria de 6 años, que el domingo
estaría en primera fila del festival de ballet y hip-hop que realizaba en
Figueres. Para cumplir su palabra, Jordi sabía que tenía que llegar a San
Sebastián en menos de 40horas. Lo había estudiado, si llegaba en este tiempo su
padre, quién realizaba el recorrido en coche y le esperaba en la meta de Anoeta,
tenía tiempo de llevarle de vuelta a casa y cumplir su palabra. La madrugada
del domingo cuando Jordi vio Anoeta en el horizonte, soltó unas lágrimas:
aquella tarde estaría en Figueres, había cumplido su palabra.
Has desafiado los
límites del cuerpo humano llegando a San Sebastián en poco más de 36h y sin
dormir. ¿Cómo lo lograste?
La verdad es que me cuesta asimilar lo que he hecho. He
estado entrenándome físicamente para esta prueba, pero no preparando mi cuerpo
para no dormir. Pienso que esto no se entrena, o se supera o no se supera. Tomé
la salida con el único objetivo de llegar en menos de 40horas: o lo hacía sin
dormir, o pinchaba por el camino. Eran las únicas opciones que me permitían
cumplir la promesa a mi hija, y llegar el domingo por la tarde a Figueres.
¿El momento más duro?
Sin lugar a duda la etapa de 150 km desde Zuera a Tafalla.
El sábado al mediodía en Tafalla llegué casi sin fuerzas. Fue una etapa muy
dura, con viento de cara, mucho calor, piedras por el camino, etc…pero mi
cabeza estaba bien y mis piernas no me fallaron en ningún momento. Pienso que
fueron las claves de mi victoria. El año pasado tardé una semana en recuperarme
física pero también mentalmente. Este año he tardado un día en reponerme.
¿Qué pensabas o
hacías en estos momentos difíciles?
Pensaba que no estaba solo. Sabía que mi familia y amigos me
estaban siguiendo por internet. Mi padre me esperaba en cada Estación de
Hidratación y en los tramos largos en que me pasaba horas solo, escuchaba
música que me recordaba a mi mujer y a mis hijos. Las noches son muy duras, la
música fue fundamental para que mi cerebro no fallara. Escuchar la canción que
le gusta a mi hijo de 8 meses, la música que me recuerda los años junto a mi
mujer, mi hija, etc.. La emoción en estos momentos es tan grande que no pude
evitar llorar en algunos momentos.
¿Qué ha sido lo mejor
de esta experiencia en solitario?
Destacaría tres momentos. Uno el tramo entre Irurtzun y Sant Esteban. Fue precioso, por ser una etapa de navegación con unos paisajes maravillosos. Otros dos el domingo: cuando vi el Velódromo de Anoeta y pensé que cumplía la promesa a mi hija, aunque reconozco que por un momento cuando vi el crono de 36 horas pensaba que el cerebro me estaba fallando, que no podía ser cierto… el otro fue la llamada a Núria,mi hija, para decirle que había llegado, que en pocos minutos me subía al coche y que a las 18h estaría en Figueres para verla actuar.